CRÓNICA: Por aquí pasó el campeón

Muchas críticas recibió la selección chilena por el título en la Copa América Chile 2015, muchos decían que fue con ayuda de los árbitros, por ser local, por querer ganar sea como sea pero muy pocos aceptaban el excelente nivel que venían demostrando. Esto se vio reflejado en esta Copa América Centenario donde Chile se coronó bicampeón, duela a quien le duela. 

Gran equipo chileno campeón de la Copa América Centenario 2016
(Fuente: ecodiarlo.eleconomista.es)

Chile llegó a Estados Unidos con la moral al tope, queriendo reeditar la campaña hecha en la Copa América 2015 en su país. Aunque nadie quería aceptarlo, Chile era una de las selecciones favoritas por el juego demostrado, jugadores de muy buen nivel y un técnico que sabe lo que quiere. Chile, sabiendo que su papel es ser "el odiado de sudamérica" cumple muy bien su papel y sabe sacar provecho a esto.

Todo comenzó el 6 de Junio en el Estadio Levi's, San Francisco cuando en su debut iba a nada más y nada menos que reeditar la final pasada contra Argentina en la que muchos podían apostar que iba a ser la final, esta vez se encontraban en fase de grupos y abriendo el telón del grupo D que lo completaban Bolivia y Panamá.

En un durísimo partido, Juan Antonio Pizzi alineó a su mejor equipo ya que el ganador, obtenía más que tres puntos, ganaba el honor, gracias a la rivalidad. Argentina se impuso 2-1 ganando los primeros tres puntos y sentenciaba a Chile a quedar en el fondo de la tabla, dolido en su honor, muchos lo daban por muerto, burlándose de los mapochos pero ellos, en silencio, preparaban un nuevo plan estratégico para vencer a sus rivales venideros como Bolivia y Panamá.

Para el segundo encuentro, Chile, comandado por Arturo Vidal, salieron al campo decididos a quedarse con los tres puntos, ya no podían dar más tregua porque podían quedar relegados en la tabla y quedar eliminados en primera ronda. Así llegó el día de enfrentar a Bolivia en el Estadio Gillette, Foxborough-Boston. Alexis Sánchez y Eduardo Vargas fueron muy explosivos y furon piezas fundamentales para la primera victoria chilena y sus primeros tres puntos que lo devolvían a la vida.

En esos días mucho se comentaba del nivel mostrado hasta el nivel de Chile, los más grandes detractores chilenos salían a la luz pero pocos veían venir que estaban hablando de la selección que a las finales iba a salir campeona del torneo. Mucho se reclamaba que había una gran diferencia negativa entre el Chile de Juan Antonio Pizzi y el de Jorge Sampaoli, se decía que había perdido fuerza, que ya no era el mismo, había perdido esa explosión y rapidez de la que muchos hablaban y dudaban de su poderío.

Así llegó el 4 de Junio, Chile vs Panamá donde cayó la boca a todos sus detractores, se destaparon todos sus jugadores, una victoria por 4-2 contundente que les hacía pasar como segundo de su grupo a cuartos de final donde se enfrentarían a México que venía en su grupo demostrando un excelente nivel y llegaba como primero del grupo C.

Los cuartos de final marcaron historia. El Chile vs México, sorprendió a más de uno. En este partido, los mapochos, volvieron a ser el Chile que todos querían ver, demostraron su verdadero potencial y apabulló a México por un contundente 7-0 en el Estadio Levi's San Francisco. Ahora Chile en un altísimo nivel, enfrentaría a Colombia en las semifinales.

El Soldier Field, Chicago fue testigo de esta semifinal que los chilenos superaron facilmente a los cafeteros por dos a cero con goles de Aranguiz y Fuenzalida y clasificaron a la tan ansiada final de la Copa América Centenario 2016. Su rival, Argentina, también derrotaba a Estados Unidos y pasaba a la final que iba a ser la misma del año pasado en el país del sur. Revancha a la vista.

Y finalmente, el Estadio MetLife, East Rutherford-Nueva York, fue testigo de una infartante final donde tuvimos noventa minutos de buen fútbol, de ida y vuelta constante, Bravo y Sergio Romero fueron las figuras ya que cada uno dejó su arco en cero y se fueron directo a los tiempos extras donde fue de mero trámite ya que ambas selecciones acusaban un cansancio evidente y tan solo esperaban la tanda de penales. Desde los doce pasos, la historia podía ser para cualquiera, el que estaba mejor mentalmente iba a ser el campeón. En Chile, acertaron todos y en Argentina, el mejor jugador del mundo, Lionel Messi, mandó su disparo por encima del travesaño y para finalizar, Biblia también falló su penal que lo atajó Sergio Romero para darle el título a una gran selección chilena que demostró gracias a buen fútbol porque es el bicampeón de América.